domingo, 21 de febrero de 2010

"El secreto de sus ojos"

"en vez de encontrar la escena del crimen, encontrarás la de un velorio"


Trago amargo la muerte
silueta borrosa del pasado, queda estampado.
Me recuerden pálida y en una sola pieza o masacrada por un lunático en mil pedazos.
Mortaja tejida o frazada de cama
cubrirán mis restos dejados.
Sean quemados o cubiertos bajo tierra
con una historia y sin futuro para ser contado.

Restos de mis extremidades
ausencia de mis ojos
mundos para no ver, dignos o no de comentar
albergue de quienes en si me guarden.

Sólo un marco de foto apoyado en los libros
uno y nada más que eso,
en la vidriera de los muertos.

Dejado dolor


Doy hoy el primer paso
y en su caminar acelerado
desaliento mis pasos con su pesar.
Lo dejo marchar, ausentarse
regalarme la gracia de su abandono.

Con la certidumbre del vacío
pleno vacío que va quedando.
Vuelvo hacia atrás la cabeza
sólo para cerciorarme
no, nadie me sigue.

Vuelvo al frente la mirada
al porvenir
abrazando la duda
amparada en la certeza única
de que ausencia más plácida no hubo nunca.