lunes, 22 de agosto de 2011

Arquitexturas


Ya no destrabas los silencios
las imágenes me gritan en la cabeza
y por pedazos de hierro se van descomponiendo
yo sabía que allí arriba algo se estaba pudriendo
tus ojos negros
un abrazo mezquino
y el vómito de la angustia abriéndote los nervios.

Quería que dispararas insectos
que los estamparas allá en su frente
y que tus labios fueran más que cerros
y que portones, y que dadores, que hormigueros
que andariveles de silencios flojos.

No existes más allá de mis oídos en los que aúllas
no te mueves fuera de mi visión periférica
ni te ausentas en otro lugar
si no en mis párpados brindando por la sombra.

Y si rodearte con mis brazos
no fuese otro diván lleno de tachas
yo querría que ahí te desarmaras
te desparramaras
te quebraras
y saldría tu olor de cada fisura
y en cada pieza tu sabor de pena
y ahí tus labios gritándome por fin
acurrucándose por los nidos de espuma
yo sabría que decirte
para que te izaras como bandera
no como paño de sábanas bordado.




jueves, 18 de agosto de 2011

El guerrero despierta


Hay una historia detrás de ese piano
no supe tal vez si tenía mi nombre en realidad
da igual, son mis notas sonando, narrándome
Y por qué no, devolviéndome.

Ahí entre esas cuerdas de piano empezó un remolino
un escondrijo mohoso de dolor achicharrándose
de mí, acurrucándome en llanto de tu muerte
en tu muerte de adolescente perdido, fantástico, vicioso.

Me observabas desde allá arriba, con tus pies sobre la mesa, revolcarme en pena viscosa, verde de pestes, negra de mentiras, de datos cambiados, de exámenes alterados, de fechas ilusorias, y allá mismo se iba levantando un escudo de piedra, un murallón de concreto, un dolor de vida perra.

Querías vendarme los ojos, querías venderte a mis brazos, querías que en ese lecho de mala muerte te ofreciera mis brazos, te cobijara y allá te durmieras para levantarte en gloria al día siguiente, clamando milagro ¡milagro!

Y yo sin entender, sin entenderte, sin entenderlo, es que lo entendía todo.
No había más muerte que tu deseo histérico de mi abrazo, ni había más lecho que tu red de metáforas de enfermo, tus ojos de pulcro vacío, aullándome.

Te abrías la piel, y me enseñabas la sangre densa correr en delgados hilos por esos brazos indefensos, asesinos, yo me desangraba por dentro, me iba pudriendo de miedo, y fui escondiendo las manos, los brazos, la cabeza, y mis ojos, con recelo, dejaste mirando a su frente, al próximo, a esa traición de sangre que quebraste sobre mis brazos arrullándote.

Corran que el niño se nos muere, y allá sola quedó la tonta.

miércoles, 10 de agosto de 2011

TIRANOSAURIO


Delirando de fiebre allá iba de playa en playa comiéndome las uñas
aunque jamás he tenido la costumbre de comerlas
un vicio psicótico de lo más despreciable
entre dedos mohosos con desiertos apilados

Prefiero teñírmelas de rojo
de esmalte carmín barato de almacén
y el termómetro tiene ese timbre agudo para marcarme los 38 grados
los energúmenos psicosomáticos
los ojos enrojecidos metidos en la garganta

Y si Peggy Lee no hubiese cantado fever
nada de esto tendría sentido
ni apetito de nada
no quiero comer y alimentar marcianos azules
pues que ya he tenido suficiente de amanecer borrosa
y de panoramas tardíos
de trizaduras heladas
y de puertas enrejadas

Tal vez la madera se haga cuerpo de diva
y al cerrar los ojos
se encuentre a Nancy Sinatra bailándose las botas
si tan solo todo se tratara de encontrar dichos populares
déjame decirte que ya todos saben que te marchas antes
por allá detrás de los autos para encapucharte

martes, 9 de agosto de 2011

Plumas alborotadas

Voces profundas
vienen
desde el océano

Se repite tu voz
en el eco en mis oídos
partiendo hojas en el camino
entre sangre blanca dibujando
tu espalda
con solo un par de dedos

Confío - no más - en mi mente
Confío - nunca más - en la televisión nacional
hablando mierda
en colores brillantes

Confío - solo - en palabras de extrañas ideas
Confío - solo - en que me exijas la verdad

Caminé bebiéndome la noche
dejando plumas alborotadas tras de mí
recordando malos sueños
anhelando que los fantasmas
azules
guiaran mi camino de vuelta

No piensas que es tiempo ya
de sacar algo de rock'an roll
antes de que la tierra
prenda fuego a cada ser humano

Me pregunto si es tiempo ya
de traer al amor
a un período de prueba
olvidando todas las promesas
de futuro
hay una montaña
que todavía quiero escalar

Llama a la noche
como terminada
invítalos a quebrar la mañana
con algo de buena música
para que no perezcamos
abandonados