viernes, 16 de septiembre de 2011

Un ojo de labio chilla

Un ojo de labio chilla
un solo par de ojos
labios rojos
aúllan

Se ha perdido el sentido consecutivo de la trascendencia
porque ya nadie quiere hablar del universo
todos temen y nadie quiere mirar el ojo único del miedo
crecen y no entornamos los ojos a ver estirarse los huesos

Un ojo de labio chilla
y quiere recuperar los silencios
y quiere partir en el abandono
para encontrar ese reflejo de riachuelo ambarino
de verdad pura sin palabras
de lengua clara, de lengua viva
de lengua piedra en la cumbre

Abres los ojos
los sacas de sus cuencas
los examinas
son masa viva
son lengua muerta
y si te metes en esas cuencas vacías
recuestas tu cuerpo cansado
chillas
los ojos te vuelven a mirar
y lo que quieres es navegar
tomas tus cuencas, tus ojos adiestrados
los abres
los lanzas
te lanzas

Ojo del universo
ojo mío que resplandece en los ojos del mundo
en tu ojo mojado
en tu ojo nervioso
ojo anquilosado a las paredes
los límites son ilusiones de miras
fronteras de cuenca muerta
ojos de lengua ávida

Cierras los ojos
y ves el universo abierto
diáfano silencioso infinito

domingo, 11 de septiembre de 2011

Lo que tengo/no tienes


Tengo un llanto de funeral atestado
tengo un dolor de piedras ajustado
tengo un espacio a mi lado
un vacío abrasador de sonidos
sonrío

Tengo una represa de caudal contenido
tengo un trozo de madera astillada
tengo un chillido ahogado
un incendio intravenoso
cierro encendidos los ojos
como puertas de calabozo

Tengo un dolor patológico en las rodillas
y bajo las extremidades, ahí junto a mi ombligo
tengo un llanto histérico de miedo
asfixiándome entre aullidos de crías hambrientas
enfilando imágenes negras de envidia

Me ciega una mano sobre la boca
me destripa audaz una sombra sin contorno
me anudan gritan por dentro
el eco de las voces diestras
un llanto como mordaza
alarga sus dedos de entraña
y me encierra aquí dentro
a padecer sus gritos y sus mañas

Tengo una traducción incomunicable
tengo recuerdos extranjeros de vida torturada
tengo agonías con mi nombre
un abrazo mal dado peor quitado
un pie desahuciado
piel de madera seca
ojos como dos trozos de río enfrascado

Tengo un derrumbe
tengo en la espalda
un cielo ardiendo en cenizas
de cristos quemados
de vitrina trizada
de puertas y ventanas clausuradas


jueves, 8 de septiembre de 2011

Un olor a solcielo


Fui atrincherarme sobre tu espalda
con corona de ojos negros
con sudor de calor solo
con amor de primavera húmeda

Fui a desvestir tus colores nocturnos
tus palabras con chocolate
y a pintar sobre tu piel
besos rojos de blancos labios

Fui por neumáticos ansiosos
para servirte de escarabajo
y por más plumas escandalosas
para servirme de crías y llanto

Fui también creyéndome madera
a tallarme unos soportes
unos monstruos amables
raíces de flor despierta

Fui por todo mi cuerpo
a buscarte un escondrijo
y partí esta vez de nuevo
a encontrarme un hito de isla sola
donde guarecer de tus partidas

Entre un sinfín oloroso
y el aire que inhalo exhalas
o que exhaloinhalas
soy una llave maestra
una tuerca perfecta

Soy imperfección de masas
soy anhelo fantástico de tarde soleada
soy cielo de mapa
mirador de paraíso
soy el atardecer previo
al anochecer de verano
con luna de luz marina